quesque cosas y asiiii

Asintió y sonrió. Le escuchó arrugando la frente y asintió, esta vez meditando. -Pues no lo sé...- susurró viéndole. -¿Tú quieres hablar de algo?- preguntó. -No eres ridículo, eso está bien...

-Vale...- dijo sonriendo -Dime como van las coss de la boda... estamos tres semanas de casarnos..- dijo sonriendo -Yo ya tengo mi traje... ¿te ha contactado la organizadora?- preguntó.

La mesera trajo las fresas y se retiró. La muchacha tomó y las comenzó a saborear escuchándole. -Sí, me contactó- susurró tragando y viéndole. -Hay un nuevo banquete y ya tengo los menús. ¿Quieres verlos conmigo en la noche cuando vuelvas?- ofreció ladeando la cabeza y pestañeó. -El vestido va bien, ya casi lo tiene.- dijo emocionada y lo miró. -Se pasa rápido el tiempo ¿no?- preguntó melancólica.

-Claro, solo recuérdamelo..- dijo viéndole -Bastante rápido, Emiliano ya tiene casi seis años..- susurró bajito.

Asintió lentamente y le miró. -Lo sé- susurró. -Me haces muy feliz ¿sabes?- dijo queriendo que lo tuviera presente siempre.

-tu me haces más feliz.- susurro y tomó una fresa igual, comiéndola.

Le miró con una sonrisa amplia en el rostro. Tomó una de sus manos encima de la mesa y suspiro viéndole con atención. -Te amo mucho- susurró y tomó otra fresa comiendola.

Sonrió muy levemente y ladeó la cabeza -Yo también... bastante bastante bastante..- susurró inclinándose para besarle en los labios suavemente y así.

Sonrió besándole con suavidad y después suspiro viéndole. -¿Quieres irte? ¿O aún deseas ver a mi hermana gemela?- preguntó divertida, resoplando.

-No sé... ¿Te interesa un trío?- preguntó sonriendo, enarcando ambas cejas, como pretendiendo que hablaba en verdad.

Le miró arqueando las cejas cruzando los brazos siguiéndole el juego. -¿Podrías con dos?- enarcó una ceja intrigada.

Soltó una risilla burlona y enarcó una ceja -Incluso con más..- dijo encogiéndose de hombros, cruzándose de brazos.

-Sí claro...- rodó los ojos ocultando la diversión de su cara y resopló. -Sabes que no dejaría que ninguna otra mujer te tocara...- susurró viéndole fijamente. -Aunque por otro lado, no sé cómo reaccionarías si otra mujer me intentara besar- dijo mas bajo solo para él.

-Pues, yo sería el unico permitido en tocar y ser tocado..- dijo sonriendo, soltando una risilla y poniéndose de pie, esperando por ella -Eso sería inaceptable..- susurró

Soltó una risita y se puso de pie, tomando su brazo mirándole. -No puedo creer que estemos hablando de esto...- susurró negando, divertida y le besó le mejilla. -¿Ya pagaste?- preguntó viéndole atentamente.

-Yo si lo creo..- susurró, negando y yendo a la caja a pagr y ya salieron de ahí -¿A dónde quieres ir ahora?- preguntó, sonriendo.

Encogió los hombros. -No lo sé- le dijo viéndole arqueando una ceja. -Esa es una fantasía tuya, hacerlo con dos como yo- dijo más bajito y se mordió el labio. -¿Quieres ir a pasear?- inquirió.

-Sería bastante genial..- susurró, imaginándose cosas por siempre y así -Si... vamos al parque central..- susurró -Tiene un lago- dijo sonriente, abrazándole de la cintura y dejando un beso en su frente, como la pareja más feliz por siempre.

Soltó otra risita. -Eres un pillo- murmuró ladeando la cabeza y amplió su sonrisa asintiendo. -Vamos...- dijo y le besó los labios. -¿Coche o vamos caminando?- inquirió.

-Caminemos... no está muy lejos..- susurró bajito, caminando y todas esas cosas, bien bonito que era todo -He analizado las cosas..- comentó.

Asintió y caminó con él tomándole la mano y después de lo que dijo arqueó una ceja curiosa. -¿Sobre qué? ¿A que conclusión llegaste?- preguntó curiosa.

-Quizá... sólo quizá debería no ser tan duro con Gisele y Lucius..- susurró bajito, mirando alrededor mientras llegaban al parque -Sölo lo considero.-

Le observó con ligera sorpresa. -Me alegra que al menos lo consideres- susurró viendo el parque; vio los columpios y la niña chiquita se apoderó y le hizo correr hasta los columpios. -¿Empujas fuerte?- exclamó volteando a verlo emocionada.

Se limitó a asentir levemente y luego suspiró, riendo al verla -Vale... vale..- susurró, acercándose a comenzar a empujarle -Eres bastante grande para esto Frida..- dijo entre risillas.

Soltó una exclamación de alegría y lo volteó a ver con el cabello en la cara. -Oh vamos... Amo los columpios. Se siente como volar- dijo y cerró los ojos mordiéndose el labio feliz de la vida.