Ñam ñam e.e

Pues el día se fue rápido porque se llevó a pasear a Emiliano al Parque y comieron helado, pero ahora estaba oscuro, a nada de llover y pues el pequeño estaba bañadito y su mamá le contaba el cuento de caperucita roja mientras el bebé estaba atento, así bien sorprendido.

Pues llegó más temprano de lo que creyó que regresaría, entró por el frente y así, pasando una mano por su cuello y sin enterarse de nada.

-¡NOOOOO! ¡CAPERUCITA!- Dijo Emiliano cubriendose con la sábana y la muchacha rió. -Peeeeero, para fortuna de Caperucita, el leñador ¡llegó en su rescate!- exclamó y Emiliano aplaudió alegremente. -Colorin colorado, este cuento se ha acabado- murmuró cerrando el libro y le sonrió. -Ha dormir, anda- le dijo arropándolo. Y pues ya se quedó allí hasta que se durmió, bien bonito.

Entró, subió a su recámara y no encontró a Frida, entonces fue a la habitación de Emiliano y guardó silencio -¿Ya se durmió?- susurró bajito.

Le acarició el cabello respingando un poco al escuchar a Carson, se giró y le sonrió. Asintió pero le hizo una seña para que entrara. -Dale su beso de buenas noches- susurró poniéndose de pie.

Sonrió levemente y se acercó, dejando un beso en la frentesita de EMiliano y suspiró después alejándose -Hola..- dijo bajito.

Le besó la mejilla y le tomó la mano saliendo de allí. -¿Estás bien? ¿Qué pasó?- preguntó viéndole.

-Me vi en la necesidad de degradar a Lucius de rango..- dijo mientras salían de ahí y esas cosas.

-Oh, cariño- le abrazó. -Supongo que se molestó-murmuró y le miró. -¿Estás bien? - arrugó la frente.

-Si, bastante..- susurró -Pero fue mucho mejor que separarlos o mandarlos a la habitación N- dijo bajito.

-Supongo- dijo y suspiró. -¿Qué necesitas? Dime- pidió viéndole sin saber cómo hacerle sentir mejor.

-Vamos a dormir..- pidió bajito -Solo quiero estar contigo en calma..- dijo bajito sonriéndole y besando su frente.

Sonrió asintiendo. -Vale- dijo y tiró de él caminando a la habitación y una vez allí se cambió por su camión y así. -Podría ayudarte a construir la casita cuando podamos- susurró

Sonrió ampliamente y asintió -Podrías ayudarme a pintarla.. no quiero que hagas trabajo duro, además Jordan me está ayudando..- susurró y se quitó la playera, quedándose en pantalones y acostándose en la cama.

-Oh vamos...- dijo rodando los ojos, trepándose a la cama, divertida. -No soy tan frágil, eh- dijo riendo acurrucándose con él. -Pero en lo que quieras, yo te ayudo.

-Vale..- dijo sonriendo, abrazándola y suspirando -Mañana debo ir a una misión, pero regresaré temorano para enseñarle la casita a Lucius..-

-¿Una misión?- frunció el ceño viéndole. -Vale...- le miró y resopló -Ten cuidado.- murmuró ligeramente tensa.

-No es nada peligrosa..- aseguró sonriendo levemente -No te preocupes-

-¿Seguro?- mumuró y suspiró. -Está bien, está bien.

-Seguro..- dijo sonriendo, besandole unos segundos y luego se separó -A dormir ya... buenas noches.-

Le correspondió el beso y asintió, quedándose dormida.