Misión trágica por siempre

-Olvídalo- negó, cayendo en cuenta que eso sería como darle a Gisele a Alan y no lo volvería a hacer, pues no. -Nada, es una idea tonta- masculló.

-Tus ideas no son tontas, Lucius- dijo tranquilamente. -Si crees que puedo ayudar en algo, dímelo- pidió entrando a su habitación al fin.

Entró también y se quedó de pie, pasando una mano por su cabello -Dame un cigarrillo... están en el mueble a un lado de mi cama- susurró, recargándose en la pared -Se me ocurría que quizá podrias hablar con Alan... no sé, decirle que a ti es a quien te corresponde perdonarme o no y ya..- dijo al fin.

Asintió yendo al mueble a lado de la cama y sacando el encendedor y un cigarrillo. Se lo acercó a la boca, meditando lo que dijo y suspiró. -No es mala idea- susurró arqueando la cejas encendiendo el cigarrillo. -¿Quieres que lo haga?- preguntó relamiéndose los labios.

-No garantiza nada..- murmuró, sintiendo el cigarrillo en sus labios, suspiró y ya cuando supo que estaba encendido le dió una calada, apoyando la cabeza en la pared y así, expulsándolo después -No se, siento que mientras yo no esté ahí.. él sabrá como manipularte- masculló.

Estaba enfrente de él y suspiró. -A lo mejor- suspiró rascándose la barbilla y se colocó a un lado de ello pensando. -Todo es demasiado complicado- murmuró cerrando los ojos.

-Perdón por complicarlo..- susurró, dando una calada más y tomándole la mano -Lo peor esque no podemos hacer mucho al respecto... en esta estúpida situación valgo tanto como un perro- gruñó.

-Igual fue mi culpa, me enamoré de ti- susurró bajando la mirada y miró sus manos entrelazadas. -No, no digas eso. Yo puedo ver, y no sé que hacer tampoco- encogió los hombros.

-Pero tu eres nueva aqui, tu aprendes de mi... yo sé las cosas y n puedo hacer nada- dijo bajito -Ya sé... ve a buscar en el libro, vmos a la cama..- murmuró dandole otra calada al cigarrillo y expulsándolo por la nariz.

Asintió conduciéndolo a la cama que es donde estaba el libro y se sentó a su lado. -Bueno, aquí está libro, veamos...- dijo abriéndolo y comenzando a hojearlo.

Resopló al sentarse y dió una última calada a su cigarrillo, expulsando el humo y extendiéndoselo a Gisele -Toma..- murmuró bajito -¿Dice algo útil?- preguntó.

Hizo un giro con el dedo y desapareció el cigarro, bien normal. -Pues...- ladeó la cabeza y llegó a donde tenía un post it. -Creoq que aquí...- dijo insegura.

-Estoy seguro que no es la cura, pero debe er algo... dime lo que diga- pidió bajito, acostándose en la cama después.

-Eh...- le temblaron las manos porque era muy extremo. (?) -Pues...- dice aclarándose la garganta. -Es una pócima que tiene un ácido extraño, dice que es muy potente pero que es doloroso- susurró asustada.

-No me importa..- dijo decidido -Nada peor de lo que haya pasado ya.- Dijo cerrando los ojos, el cigarrillo lo había relajado bastante, esque Gisele no sabía que tenía marihuana y así -¿Cómo se hace la pócima?- preguntó.

-Son cosas raras- dijo frunciendo el ceño. -Parece una pócima de brujas- dijo temblando y ladeó la cabeza. Y ya, le recitó todo lo que debían hacer porque mi cabeza no da para mucho ahora.

-Estoy seguro que Carson tiene todo eso por ahi- murmuró, suspirando y pasando una mano por su cabello -Si viene mas tarde o mañana pues... le preguntamos- susurró bajito.

Asintió cerrando el libro y suspiró relamiéndose los labios acostándose en la cama, cerrando los ojos, pensando.

-Deberías ir a tu habitación..- dijo bajito -No es que no te quiera aqui pero, no quiero hacer a Ellen enojar más..- susurró.

Abrió los ojos viéndole y apretó los labios. -Si quieres que me vaya está bien, te dije que no quería hostigar- respondió poniéndose de pie acomodando la blusa.

-Hey..- dijo palpando everywhere para agarrarla -No es eso... sólo que estamos regreso en el clan. no podemos levantar sospechas- le dijo bajito, haciendo una mueca de lado y así -Comprende.-

Se dejó agarrar y asintió. -Voy a mi habitación... Estaré atenta a cualquier cosa que necesites- dijo y se fue de allí entrando a su habitación.

-Vale...- susurró, quedándose quieto por si le besaba o algo pero no, entonces se quedó ahí quieto un momento, después suspiró y  tras tropezar varias veces, llegó a su mueble, abriendo el primer cajón y buscando cosas, oh si.

Entró a su habitación distraída, tropezando y gruñó de mal humor, dándole un portazo. Y pues ya, se acostó en la cama, pensando cosas.