Se aman por siempre, pero todo es dificil

-Y tú a mi, como no tienes idea- susurró en un gruñido y aprretó las piernas alrededor de su cadera besándole todo lo que podía.

Pues nada, pinche Gisele no llena osea golosa. Ronroneó bien intenso y nada, se corrió dentro de ella soltando una exclamación bien histérica y así.

Sonrió finalmente y gritó medio histérica igual y se aferró a él y al colchón y se mordió el labio con fuerza. Se quedó así respirando cada vez menos agitada y abrió los ojos sonriéndole. -¿Ves...? No me partí- murmuró divertida.

-pura suerte..- dijo entre risillas, ronroneando y besándole el cuello suavemente, con amiento no se que.

-No es verdad- dijo enseñándole la lengua y riendo. Le alzó la cara y le dio un suave beso mordiéndole el labio inferior después. -Tengo hambre... Tanta actividad me dio hambre- rió bajito.

Río y nada, enarco una ceja -¿De humano o de mi?- preguntó bajito, acariciándole Eleodoro suavemente y la miraba toda, esque pinche Gisele esta bien buena.

Se mordió el labio ladeando la cabeza. -Las dos- respondió divertida. -Pero igual no quiero secarte también en ese aspecto- dijo divertida por las miradas de Lucius. -¿Qué tanto miras?- preguntó riendo.

-de mi por ahora, ee humano mañana..-susurro sonriendo, encogiéndose de hombros después -esque eres hermosa..-susurro mirandole a los ojos.

Se estiró un poco y asintió. -¿No tienes hambre tú?- murmuró y ladeó la cabeza. -¿Tú crees?- sonrió amplio. -Bueno, te creeré porque eres tú- y le acarició el cuello.

-no, yo n no..- susurrosonrendole viéndole a los ojos

Le sonrió acariciándole la cara un momento y sonrió dejando que los colmillos salieran solitos y ahogó una exclamación. -Vaya..- dijo sintiendo el filo de los mismos.

-Sólo hazlo..- murmuró sonriendo, acariciándole los costados suavemente.

Lo acostó y le dio un beso en los labios antes de bajar a su cuello para clavar los colmillos. Una vez que lo hizo lo aferro bien a ella comenzando a beber lento.

Se acostó y nada, gruñó sonriendo y cerró los ojos, se sentía bien que le mordiera y todas esas cosas.

Después de un pequeño momento se separó y sonrió levemente sintiendo que los colmillos desaparecía y le lamió la herida para después dejar pequeños besitos por su cuello. -Estás sabroso- dijo riendo un poco sin notar que un hilillo de sangre le corría por el cuello desde la comisura.

Soltó una leve exclamación al final y sonrió de lado -Estoy bien bueno, lo sé..- dijo sonriendole, mordiendo su labio inferior y viéndole -Tienes algo ahí..- dijo señalando su cuello, yendo él y con su lengua se deshizo de ese rastro de sangre, y al llegar a sus labios ronroneó y le besó intensamente.

-También estás bien bueno y eres modesto- rió suavemente y se mordió el labio cuando hizo eso y también le besó intensamente para separarse después a regaña dientes.

-Debemos dormir... es tarde..- susurró bajito, haciendo una mueca y suspirando -Mañana iremos a comprar las cosas y así, ah.. y debo ver el vestido..- dijo sonriendo.

-Lo sé- dijo acostándose a su lado, y se tapó hasta los hombros. Sonrió levemente y asintió. -Sí, cariño. Verás el vestido- dijo acurrucándose en él.

-Pero sólo el vestido, no quiero verte con él puesto.. quiero que sea una sorpresa..- susurró sonriendo -Debemos comprarles un regalo de bodas también, ¿no?-

Sonripo amplio. -Sí, me parece bien- dijo besándole la clavícula y suspiró. -Sí es verdad y no sé que demonios darles- dijo pensativa.

-Juguetes sexuales, te apuesto a que si los usan...- dijo sonriendo, soltando una risilla traviesa después.

Soltó una carcajada negando un momento. -Claro... Yo pensando en una vajilla y tú en juguetes sexuales- murmuró divertida. -Pero no es mala tu idea...

-Vajilla... Margarette tiene cara de jamás en su vida ha tocado la cocina..- dijo humedeciendo sus labios -Sé que es buena idea... podemos darles unas esposas, unas correas, un vibrador, ropa interior de dulces, yo wue sé..- dijo pensando un sin fin de posibilidades -Incluso, podríamos comprar unos para nosotros..- dijo ronroneando.

-¿Quien sabe?- murmuró divertida escuchándole con las opciones y tragó saliva. Asintió al final sonriendo abrazándolo. -Me leíste la mente ¿Sabes?- susurró besándole con suavidad y luego se separó sonriente.