Se aman por siempre, pero todo es dificil

Sonrió sin quererlo y le correspondió el beso con cuidado acunando su rostro en tre sus dos manos.

Le siguió besando y cerró los ojos, queriendo llevar una mano a su espalda, pero en su lugar la puso sobre su trasero y eso no le importó, aprovechó y le apretó un poco, nombre si mi mijo anda que hasta nomás.

-Pero estás enojadito- balbuceó poniéndose de pie y tropezando un par de veces para dar contra el suelo. Rodó y y se intentó poner de pie otra vez. -Lo siento, soy tonta- murmuró mareada.

-No cariño, no lo estoy.. no fue tu culpa..- murmuró, apretando los labios al verla caer y luego la cargó -No lo eres preciosa, ya ya..- dijo besando su frente y caminando adentro y así.

Siguió el beso hasta que puso mano en su trasero y se separó respingando. -Carson y Frida van a llegar, no debemos- dijo sin separarse- juntó su frente con la de él.

Se quejó bajito y negó -Pero yo quiero...- murmuró abriendo los ojos, aunque no hubiera diferencia y resopló. -Aaandale..- murmuró tomando su rostro en sus manos, acercándose lento de nuevo, rozando sus labios hasta llegar a su cuello y besarle bien sexoso y así

-¿Entonces no me odias? ¿No me vas a dejar de querer?- preguntó vulnerable y lo abrazó por el cuello. -Porque yo te amo tanto y soy toda tuya- dijo cerrando los ojos, media agitada.

-Claro que no te odio, como se te ocurre..- dijo bajito, negando y llegando a la sala al fin -Cálmate preciosa, te amo también y soy todo tuyo..- dijo bajito -Ya..- murmuró, poniéndose de pie y yendo a la cocina, tomo agua y le puso sal, se la dió y luego fue por... ehm, algo mágico para quitarle lo drogado.

Cerró los ojos dejándose medio llevar y después negó. -Cariño,, yo igual quiero pero por favor ¿qué pasaría si Carson cruza esa puerta y nos ve en una posición incómoda?- inquirió a su oído acariciándole los hombros. -Más tarde y te doy una sorpresa también ¿si?- negoció.

-Los podemos invitar a un trío.. o un... como se llame..- dijo entre risillas, dejando un mordisco en su cuello -¿Me prometes que la sorpresa será buena?- preguntó bajito, haciendo una mueca y tallándose un ojo y así.

Asintió levemente y se calmó de manera notable. -Vale- dijo acurrucándose en un sofá mientras Carson iba a no sé donde y pues ella se quedó allí mordiéndose un dedo y después suspiró, ansiosa. -¿Dónde estás?- se quejó arrugando la frente.

-Aqui..- dijo dándole el vaso de agua y sentándose a un lado de ella -Tomalo, en nada se te quita eso... vamos.- dijo poniéndose de pie esperandi a que bebiera todo y eso.

Soltó una risita y suspiró alborotando su cabello. -Es una buena idea pero creo que nos mandaría al diablo- susurró asintiendo y le mordió suave el labio inferior. -Lo prometo, te gustará- aseguró.

-Bueeno..- accedió quejándose bajito y la soltó para que se pusiera de pie y arreglara si tenía -A mi me va a regañar de todas maneras..- canturreó -No le gusta que me droge..- dijo entre risillas,

Tomó el vaso y le dio un trago. Hizo una mueca e hizo cara de asco. -Sabe feo- dijo volviendo a tomarlo sin respirar y jadeó cuando acabó el vaso.

-Pero te hace bien..- dijo sonriendo, asintiendo al final -Muy bien..- dijo tomándole de la mano y poniéndole de pie -Ya, vamonos que nos deben estar esperando.- susurró.

-A mi tampoco me gusta que lo hagas, Lucius- susurró y se arregló la ropa por si se veía muy chueca y suspiró. -Pero está bien, no te regañaré yo- dijo asintiendo.

-Casi no lo hago..- susurró, sentándose y pasando ambas manos por su rostro, haciendo una mueca y esas cosas -De seguro mis ojos están rojos.. me eh de ver horrible- masculló.

Asintió y se puso de pie caminando con él y volteando a ver a todos lados. -Y... ¿qué harás?- inquirió frunciendo el ceño.

-pues... Ver si en verdad ese libro es de ayuda, y regañar a Lucius..- susurro, comenzando a subir las escaleras y todas esas cosas.

Lo peinó con sus dedos cariñosamente. -Estás guapo pero si tienes los ojos un poco rojos- susurró besándole los labios antes de ponerse de pie y caminar por la habitación.

-Entonces me veo más guapo..- dijo entre risillas, sonriendo levemente y besándole también -Estoy seguro que tu estás hermosa como siempre- susurró humedeciendo los labios y comenzando a balancear las piernas, como un niño y así.

-Ah...- dijo asintiendo sintiendo como todo se volvía normal. -¿Se portó mal?- inquiere haciendo memoria pero pues no, el cerebro no le daba para mucho.

-Muy mal..- dijo asintiendo, ya llegando al tercer piso y pues comenzaron a caminar a las habitaciones, esque la de Lucius estaba al final del pasillo -Por eso tu no debes portarte mal, si no me enojo..- dijo sonriendo.

Sonrió un poco poniendo las manos en la cadera y encogió los hombros. -Supongo- dijo soltando un suspiro. Fue al libro y abrió donde había visto el conjuro ese para no tener que buscarlo después.